viernes, 20 de enero de 2012

Año nuevo, nuevas expectativas

Cuando era niña usaba las faldas de mi mamá como vestidos, sus tacos y cogía el control remoto de la radio, ponía música y cantaba.
En las fotos me gustaba hacer muecas. Mi padre siempre me gritaba porque, según él, "malograba" las fotos «Tú siempre tienes que estar haciendo esas caras ¿No? ¡No puedes estar tranquila!» Pues no, no puedo estar tranquila, siempre que escuchaba música tenía que cantarla. Es que así soy.
Conforme iba creciendo al estar con mis amigas, me daba cuenta que al decir expresiones de los demás siempre exageraba, siempre le daba ese toque que representaba al quién imitaba.
Por otro lado, mi hermana siempre me ha dicho que soy una teatrera. Y mucho de mentira no tiene eso, pues siempre, al decir una mentira, me ha salido bien y he podido manejar la situación. Por un lado, creo que no está bien. Sin embargo, considerado que es un acto de imaginación e improvisación. Crear un espacio y una historia en menos de lo que alguien abre una puerta. Es cierto, soy exagerada, pero quizás es porque tengo cierta creación nata.
Hace unas semanas, me encontré con el mejor amigo de mi hermano. Ellos se conocen desde hace mucho tiempo, cuando yo tenía 2 años, él ya me conocía. Estuvimos conversando y entramos al tema de cuando yo era chiquita. Mi hermano y él tienen aproximadamente 30 años. Me empezó a contar que yo era una máster contando chistes. No le creí. Por lo general, siempre recuerdo todo lo que me ha pasado en la vida, pero esto ni me lo imaginaba. Me dijo que yo de chiquita siempre interrumpía las conversaciones y decía «Tengo un chiste!», todos se callaban y me escuchaban. Me contó que eran chistes monces y que si otra persona se lo hubiera contado ni risa le hubiera causado, sin embargo era mi forma de contar lo que siempre daba risa. Según él, me paraba al frente de todos y empezaba a parpadear bastante mientras contaba el chiste y que, encima, cada vez que me pedían uno y no tenía me hacía la payasa y decía «No, estoy ocupada». Y solo tenía 3 años, qué payasada ¿no?
Una vez, cuando mi mamá se fue de viaje, mi padre tenía que estar a cargo de nosotras. Una noche, fuimos a cenar a un restaurante donde ponían música de los 80s. Como sabrán me encanta ese tipo de música. Pasaron "I will always love you". Estábamos cenando, cada uno con el tenedor en la mano, cuando de pronto dejé el tenedor, cerré mi puño y lo usé como micrófono. Y empecé, obviamente no canté solo hacía muecas y solo movía la boca. Mi papá y mi hermana se mataron de risa. Yo también. "And i will always love you, ohhh will always love yoooouuuuuuuuuu..." seguidamente del saxofón que hacía que mi cuerpo se moviera como si estuviera en el mar. Seguí "cantando". Estuvo bueno. Mi papá me dijo «Siempre te ha gustado hacerla de cantante ¿no? Deberías actuar, oye».
Me quedé pensando en lo que me había dicho. Mi padre es una de las personas más críticas, sus comentarios a veces son hirientes, y que me diga eso, que fue casi como un alago para mí, hizo que se me moviera el piso. Yo solo me reí y traté de no hacerlo muy importante. Esto de la actuación, el fingir, el cantar, etc. siempre me ha gustado pero he tratado de no darle tanta importancia. Es difícil para alguien que estudia ingeniería de sistemas, aceptar estos gustos, sobretodo cuando a mi familia le importa un carajo el arte. Solo somos receptores mas no emisores. Además yo estudio ingeniería de sistemas que es totalmente lo opuesto al arte.
Mi universidad tiene círculos y asociaciones donde puedes ser parte solo siendo alumno. Una vez ahí te conviertes en miembro y recibes clases de lo que te quieras inscribir. Yo ahora soy parte del Círculo de Artes Escénicas de la Universidad de Lima. Jamás he actuado ni recibido clases sobre teatro, ni formación... nada. En la primera clase, me fue súper bien, tuve que actuar con un chico. Teníamos que pelearnos y al final solucionarlo. Salió buenazo, todos se mataron de risa. Tengo que decir que esto es lo mejor para mí ¿Por qué no usar una capacidad nata en mí? Quizás no sea la mejor pero me gusta. No pienso cambiarme de carrera, por lo menos no a comunicaciones pero me gusta el teatro. Ya les contaré cómo me va, es buenísimo, deberían meterse ustedes también :)